Polvorineshandb dialogó con Sebastián
Ferraro, DT del primer equipo masculino
y Coordinador General del handball de la pólvora, quien analizó el mal año del
SAG Polvorines y adelantó los objetivos para el 2020.
Tras finalizar el 2018 fuera del súper 7 en
la última fecha por un par de puntos, todos imaginábamos que el 2019 sería muy diferente
y que el equipo de LHCab de SAG Polvorines, con una buena pretemporada, encontraría
una regularidad que lo llevaría a pelear
por cosas importantes.
Sin embargo el 2019 no fue el esperado y así
lo resume Sebastián Ferraro, “A principio de año la idea era buscar algún
torneo corto. Pero con la ida de Robertino Pagano (al handball italiano) los
objetivos cambiaron.
Sabíamos que era un jugador clave para
nosotros en la parte ofensiva y a partir de ahí cambiaron los objetivos.
Sabíamos que iba a ser un año difícil y teníamos que apuntar a mantener la
categoría”.
No solo la partida de Pagano le cambio la perspectiva
a las ilusiones de los alemanes también las diversas lesiones, sobretodo en sus
dos figuras principales, Tobías Wolf y Leonardo Gervasoni. “Tuvimos dos bajas
muy importantes como Leonardo Gervasoni, que hasta la fecha 10 venia con un
promedio de cinco o seis goles por partidos más un importante aporte a nivel
juego y Tobías Wolf, que estamos acostumbrados a que sea nuestro goleador,
nuestra carta ofensiva. Esto nos llevó a rotar y replantear el juego ofensivo y
el equipo en general”, sostuvo el DT.
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| Ferraro analizó el año de la pólvora y fijo el objetivo para el 2020, el ascenso a LHCab. |
También reafirmó que “estas Lesiones nos
dejaron bastante diezmados. El no haber tenido al 100% a nivel físico a algunos
jugadores que nosotros considerábamos importantes, nos llevo a tener algunas
complicaciones, a no poder encontrar nunca un nivel de juego. Todo el tiempo nos encontrábamos cambiado el
equipo porque jugadores arrastraban lesiones”.
La Polvorines tuvo que recurrir a pibes de
las inferiores y también conto con la vuelta al primer nivel de Damián Migueles
y Gabriel Nardelli. A pesar de esto el equipo nunca encontró la regularidad desea
y así lo explica Ferraro “Tuvimos que recurrir a jugadores más jóvenes. Pasamos
de tener a Patricio Crotti, un chico de 18 años, jugando cinco, diez minutos
por partido a que juegue 60 minutos. Creo que partido a partido demostró que
tiene las condiciones pero se notó nuestra falta de rotación y solides en el
ataque”.
Así como el juniors Patricio Crotti se puso
el equipo al hombro durante el año, mucho se habló en el club de la posibilidad
de que el juvenil Leandro Bienatti subiera al primer equipo, pero obviamente el
nivel del equipo y la posición en la tabla no ayudaban a que una de las
promesas del club debutara en el primer semestre. Sobre esto Ferraro nos
detallo que “lo de Leandro Bienatti es algo particular. Es un chico muy joven,
con mucho talento. Lo que no quise generar con él, es lo que le paso a “Pato”
Crotti, de que tenga muchos minutos en Liga siendo tan joven. Elegimos llevarlo
de a poco. Lo sumamos a la lista del Nacional B, donde ganó minutos y mostró,
lo más importante para nosotros, madures en la cancha. Nos quedamos muy
contentos con el rendimiento en de Lean y a la vuelta de Neuquén, los sumamos
al plantel superior para los partidos a nivel metropolitano”.
Como Coordinador, el también Director Técnico
de la Selección Nacional de Beach Handball Masculina, realizó un análisis de
todas las categorías.
“En las categorías B y C nos paso algo
similar que al equipo principal, sufrimos mucho con las lesiones. Consideremos
que hoy, a fin de año, tenemos a diez jugadores que arrastran diversas
lesiones. Es demasiado, encima jugadores que en cada categoría eran muy
importantes y claves. Habían agarrado continuidad, se habían establecido en el
equipo de mayores y de repente los
perdemos. De nuevo se genera esa inestabilidad en el equipo”, sostuvo Ferraro.
Al tener tantas lesiones no quedó más remedio
que recurrir a los chicos de las divisiones inferiores pero siempre con un
mensaje claro; no exponerlos ni cargarlos de una presión que no les correspondía.
“Ante esas situaciones (las lesiones) buscamos fortalecernos con jugadores de
las inferiores, que en los minutos que les tocaba jugar hicieron buenos papeles
pero al ser una categoría completamente distinta y otro ritmo, no se podían
hacer cargo de la situación como lo tendría que haber hecho un jugador mayor.
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| El rostro adusto del DT no se modificó en todo el año |
Nos sirvió para foguear de a poco a los más
jóvenes y que jueguen tranquilos sabiendo que no eran salvadores de esas
categorías” explicó el coordinador general.
Estos chicos que tuvieron minutos en los
equipos mayores obviamente tuvieron sus torneos en inferiores. Polvorines que
el año anterior había jugado un repechaje por ascender, este año estuvo lejos
de este objetivo pero Ferraro afirmo que “en inferiores caballeros no estuvimos
tan lejos. En el promedio general nos quedamos a tres o cuatro puntos de la
zona de ascenso (NdeR: en realidad Polvorines quedo sexto a 26 puntos en la
general de Mitre, el ultimo ascendido).
Sabíamos que iba a ser un año difícil. Que era complicado buscar un
ascenso. Tuvimos una primera mitad bastante buena, con buen nivel de juego, con
los juniors haciendo buenos partidos.
También sabíamos que a los cadetes se les iba
a complicar un poco más. Primero por la cantidad de jugadores que eran y por el
sistema de rotación.
Y en los juveniles también estaba complicado,
por una irregularidad en el juego que venían demostrando”.
Por todo eso “sabíamos que el ascenso era
difícil por eso apuntamos mas al desarrollo deportivo que a los resultados.
Siempre pensando también, en ganar los máximos partidos posibles obviamente.
Pero poniendo por delante el desarrollo individual de los jugadores”.
En las mujeres el panorama no fue el esperado
y la tira descendió a la D. Sobre esto el Coordinador general del handball
alemán manifestó que “en las chicas, vemos reflejado, el tener tan poca
cantidad. Comparado con la rama masculina, debemos tener un 40% menos de
jugadoras. Es uno de los temas a mejorar para el año que viene.
También estaremos cambiando la disposición de
los entrenadores. Nicolás Mangini trabajo con cuatro categorías y obviamente es
demasiado para cualquier persona. Se vio excedido, por tener que dividirse en
cuatro y nos parece que para el año próximo va a ser positivo que reparta esas
categorías con otros entrenadores”.
Donde sí hubo muy buenos resultados y con muy
gratas sorpresas. El año pasado las chicas habían conseguido el ascenso a
Segunda Damas de la mano de Diego Rampi y este año estuvieron a tan solo dos
puntos del ascenso a Primera.
Ferraro no tuvo más que palabras de gratitud
para los entrenadores que casi logran el golpe ascender: “lo de Diego Rampi me
pareció un trabajo muy bueno. Con una filosofía de juego muy interesante, que a
las chicas les dio muchos resultados y le cambio un poco lo que se venia
planteando en el plantel superior con entrenadores anteriores. Fue muy
beneficioso.
Por el alejamiento de Diego tuvimos que ir a
buscar un entrenador interino y me pareció una buena opción sumarlo a Leonardo
Gervasoni que hizo un gran papel, sabiendo tomar las cosas buenas que había
generado Diego, explotándolas más todavía y poniéndole una impronta mucho más
formadora de jugadores como tiene Leo.
Los resultados están a la vista, dirigió ocho
partidos y ganó siete y empató uno.
Tiene una idea de juego que no varía mucho con la de Diego pero si con una
impronta propia que surtió efecto y fue bastante positivo para el equipo”.
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| Ferraro junto al capitán del primer equipo Iván Ruzzante |
El año próximo será un año muy diferente para
SAG Polvorines. Después de veinte años no habrá partidos en LHCab. Los tres
equipos de mayores caballeros jugaran los domingos. Las chicas tendrán en 2020
la obligación de igualar o mejorar los resultados de este año ya que, la base
del equipo se mantendrá. Las tiras de inferiores deberán luchar por el ascenso.
De cara a todos estos cambios Ferraro
anticipa el panorama de cada categoría; “Desde mi puesto de coordinador la idea
es mover algunas piezas. Cambiar algún entrenador de alguna categoría.
Tenemos la iniciativa, ya hablada y aprobada
por el club, de formar una categoría B masculina de menores, cadetes y
juveniles. Para potenciar a los chicos, que todos tengas más minutos en cancha.
Esto significa que seguramente traigamos un entrenador nuevo de afuera.
Esto nos genera buscar un ascenso, que todos
los jugadores tengan su momento en la cancha y no estén esperando una rotación
En mujeres trataremos de elevar la cantidad
de jugadoras. La idea es que los entrenadores trabajen en las colonias del club
para reclutar jugadoras.
Con los mayores también habrá cambio de
entrenador en el B y C. Con este tema de que ahora el primer equipo también
jugará los domingos, se superponen con el B y C que eran dirigidos por dos
jugadores que el año próximo quieren seguir jugando y por ende no van a poder
seguir a cargo de estas categorías. Así
que buscaremos nuevos entrenadores y plantear objetivos para cada categoría.
Cada equipo tendrá su propio horario de entrenamiento, esencia o objetivo. Cosa
que este año con el equipo B no pasó. Ya que entrenaba con el primer equipo y
no termino nunca de encontrar su esencia”.
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