Tras muchos años sin reformas significativas en el gimnasio de SAG Polvorines el club ha decidido el mejoramiento del parquet donde se realiza la actividad que tanto queremos como es al handball. En el regreso de a los entrenamientos las diferentes categorías han podido observar con mucha ilusión como por ahora se está lijando la cancha para luego volver plastificarla.
Más objetivos
A demás del mejoramiento del gimnasio el handball de la pólvora tiene muchos objetivos por delante durante este año. Para comenzar los mayores en Liga de Honor Caballeros intentaran terminar de concretar todo lo que prometen. En los últimos años la pólvora ha comenzado los torneos con muchas ilusiones y dando golpes de escenas importantes (por ejemplo el multicampeón UNLU el año pasado no lo pudo derrotar nunca) pero en los últimos tramos de los torneo se ha apagado. Para este año Guillermo Milano tendrá que ver como reemplaza a un hijo de la casa, Juan Bar, que se marchó para jugar en UNLU y a los pivot Gonzalo Iglesias y Federico Levie, bajas por lesión. Para tratar de compensar esas bajas volvió otro hijo de la casa como Robertino Pagano, que tras una larga travesía por el handball italiano vuelve a SAG Polvorines. Otras dos incorporaciones confirmadas hasta el momento son Bruno Ferrari y el joven tucumano Cristian Heredia.
Juan Bar le dijo adiós a Polvorines |
En cuanto a las damas el entrenador Ignacio Rodríguez no ha sufrido bajas considerable con respecto al plantel que consiguió el ascenso a tercera y la tercera ubicación en el torneo clausura 2016. Por lo cual el objetivo principal del año será poder mantenerse en tercera y porque no intentar un ascenso a segunda. En cuanto a las tiras las ilusiones también está puestas el ascenso de sus dos ramas. Los varones intentaran regresar a la A mientras que las chicas harán todo lo posible para salir de la C y pegar el salto a la B. ©CRAM